El autor confeso del atentado con camión del año pasado en el centro de Estocolmo en el que murieron cinco personas, el uzbeko Rakhmat Akilov, fue sentenciado este jueves a cadena perpetua por un tribunal sueco por un delito de terrorismo.
Akilov, un solicitante de asilo simpatizante del Estado Islámico (EI) que tenía orden de expulsión de Suecia, recorrió el 7 de abril de 2017 casi 600 metros de la principal calle peatonal de la ciudad con un camión robado hasta estrellarlo contra la fachada de unos grandes almacenes.
Durante el juicio, confesó que pretendía obligar a Suecia a dejar la coalición internacional contra el EI y a no patrocinar una guerra en la que mueren “millones de musulmanes inocentes”.
La condena por terrorismo se basa en las cinco muertes y en la destrucción provocada que causó además “peligro público”, según el fallo, que lo considera culpable también de 119 intentos de asesinato y de poner en peligro a 24 personas, además de decretar su expulsión de por vida de Suecia tras cumplir la pena.
Rakhmat Akilov -de 40 años, separado y con 4 hijos- llegó a Suecia en 2014 y solicitóasilo alegando que sufría persecución política en Uzbekistán, pero las autoridades no dieron credibilidad a su petición, que además había hecho bajo identidad falsa.
Su solicitud de asilo fue rechazada finalmente en diciembre de 2016, cuando se decretó su salida del país, y fue a finales de febrero cuando la policía emitió una orden de búsqueda contra el uzbeko, que permaneció en Suecia en la clandestinidad.